Los grafitis urbanos se han convertido en una estampa habitual en muchas ciudades del mundo que, en algunos casos embellece y, en otros, estropea las urbes. Reciben tantos elogios como críticas, aunque convendría distinguir entre el arte urbano controlado, aquel que promueve la expresión artística a través de esta técnica, y el vandalismo, cuyo único fin es el deterioro de los bienes y espacios urbanos.

La limpieza de los graffitis, provoca unos gastos anuales considerables a las arcas de cualquier municipio; además también hay que tener presente el coste medioambiental que supone su eliminación, en primer lugar por la cantidad elevada de agua que se necesita para su limpieza como por la contaminación provocada por el empleo de productos químicos.

En Dimasa disponemos de un excelente producto destinado a tal fin, LIMPIAGRAFFITI. Pero antes de emplearlo, debe serguir las siguientes indicaciones:

  • Antes de utilizar, limpiar las paredes manchas con agua, jabón y un cepillo.
  • En piedra o ladrillo se puede aplicar un disolvente dejándolo actuar durante el tiempo recomendado. Este tipo de superficies son especialmente difíciles de limpiar.
  • Totalmente compatible con máquinas de presión.