Según la OMS una de las principales vías de trasmisión del COVID-19 es el contacto con superficies contaminadas. Por esta razón, una desinfección exhaustiva es primordial para prevenir el contagio.

La desinfección por vía área de superficies y ambientes (DSVA) es una tecnología muy apropiada para completar los procesos de limpieza y desinfección, ya que es capaz de alcanzar zonas críticas a las que sería difícil de acceder con las técnicas tradicionales.

El DSVA garantiza una desinfección rápida, fiable y segura de espacios como oficinas, laboratorios y zonas de producción de la industria alimentaria.

En la desinfección por vía aérea se utilizan equipos de nebulización en frío. Estos consiguen, a partir de un líquido, una niebla formada por gotas de un tamaño de partícula de aproximadamente 30 μm (Stanga, M. 2010).

El desinfectante es dispersado en forma de pequeñas gotas similares a la niebla, utilizando el aire comprimido como fuerza impulsora para la formación de la misma. De esta forma, la niebla, que se comporta como un gas, alcanza todas las zonas del local, accediendo a rincones o zonas que serían inaccesibles mediante una pulverización convencional. Las pequeñas partículas de agua en las que se encuentran disueltos los principios activos biocidas del desinfectante, se depositan sobre las superficies de la sala, formando una delgada película sobre ellas.

El desinfectante más habitual para esta aplicación suele estar compuesto por amonios cuaternarios, peróxido de hidrógeno, ácido peracético y glutaraldehído. Por ello, desde Dimasa, ofrecemos el nuevo atomizador para desinfección de hospitales, residencias de mayores, colectividades y otros entornos se enfrentan al desafío de desinfectar superficies y zonas de difícil acceso, debajo de las encimeras y detrás de los equipos con una regularidad aún mayor.

Los sistemas de atomizador portátiles de Whaspro permiten una desinfección de superficie rápida, eficiente y completa al llenar el espacio con una fina niebla de desinfectante Oxel con gotas de 5 a 80 micras, eliminando hasta el 99,999% de los patógenos.